
Comparando las dos guías alimentarias, la guía de México y la de Turquía hablan sobre la alimentación correcta, mencionando que es
la obtención de alimentos que proporcionen los nutrimentos que se necesiten de acuerdo a la edad, la actividad física, sexo y estado de
salud característico de cada persona.
La guía mexicana explica de manera más amplia lo que es la alimentación correcta atribuyéndole diferentes características como: alimentación completa, equilibrada, higiénica, suficiente, variada y adecuada.
En ambos esquemas visuales se evitó dar recomendaciones cuantitativas, dado que las necesidades nutrimentales difieren en forma muy notable con la edad, el tamaño corporal, el sexo, la actividad física y el estado fisiológico (crecimiento, embarazo, lactancia). Por lo que al señalar cantidades se podría fomentar el consumo excesivo en algunos individuos y el consumo deficiente en otros, promoviendo, de esta manera, obesidad o desnutrición.