
Las bebidas se toman para calmar la sed o por placer, proporcionan agua al cuerpo, refrescan y alimentan, la cerveza se considera una bebida estable microbiológicamente debido a la presencia de etanol (0.5-14 % v/v), presencia de sustancia amargas procedentes del lúpulo, valores de pH bajos y concentraciones reducidas de oxígeno, sin embargo, hay un grupo pequeño de bacterias alterantes resistentes a estas condiciones, siendo las bacterias ácido-lácticas (BAL) los microorganismos más comunes que pueden llegar a producir turbidez, olores y sabores desagradables trayendo consigo importantes pérdidas económicas para la industria cervecera.