El potencial oculto en las cáscaras de mango: nutrición, salud y sostenibilidad

Resumen

El mango (Mangifera indica) es una fruta tropical perteneciente a la familia Anacardaceae; su cultivo se remonta a tiempos prehistóricos en diversas regiones de la india, pero hoy, este fruto se produce en diferentes países alrededor del mundo como Tailandia, Perú, Sudáfrica, Egipto, Israel, Brasil, Cuba, Filipinas, India, Indonesia, Florida, Hawai y México, entre otros. En el año 2021, la producción mundial de mango sobrepasó los 57 millones de toneladas (1), siendo México uno de los seis mayores productores del plantea. El mango es cultivado en 23 de los 32 estados mexicanos, con un volumen de producción de más de dos millones de toneladas para el año 2022 (2), lo que  representa una gran noticia para la economía del país. Sin embargo, el aprovechamiento de este valioso fruto trae consigo la generación de una gran cantidad de residuos orgánicos, cuya descomposición impacta negativamente en el medio ambiente. La revalorización de cáscaras y semillas del mango a través de su aprovechamiento biotecnológico para la elaboración de alimentos funcionales, es una alternativa para disminuir el impacto ambiental de su descomposición y maximizar el aprovechamiento de este fruto.